Intel presentó hoy en sociedad su familia al completo de procesadores Cascade Lake W (CSL-W), es decir, los Intel Xeon W 3000 Series, familia conformada por nueve integrantes, partiendo desde los 8 núcleos y 16 hilos con un elevado TDP de 160W hasta alcanzar los 28 núcleos y 56 hilos con un TDP de 205W debido a una arquitectura ya muy reutilizada al igual que su proceso de fabricación @ 14nm++. Pese a ello, se requerirá de unas nuevas placas base con el socket LGA3647 para su utilización.

Respecto a Cascade Lake W, ha habido un aumento de los núcleos, aunque claro, el TDP también ha subido exponencialmente entre un 33 y 46 por ciento respecto a sus predecesores, a lo que se le suma la integración de la tecnología Turbo Boost 3.0, la frecuencia máxima que podrá alcanzar un único núcleo. Todos estos procesadores se pueden unir a configuraciones de memoria Hexa(6)-Channel donde instalar hasta 1 TB de memoria RAM DDR4 @ 2933 MHz (vs 2666 MHz de Skylake W), mientras que los procesadores con la coletilla final “M” admitirán hasta 2 TB de memoria RAM.

Todas estas CPUs ofrecen 64 líneas PCI-Express 3.0 frente a las 48 que ofrecía Skylake, por lo que el PCI-Express 4.0 será, por un largo tiempo, una interfaz exclusiva para los productos de AMD.

Además de los elevados TDP frente a la competencia, lo más importante también son los precios, ya que por ejemplo el Intel Xeon W-3275 con 28 núcleos y 56 hilos de procesamiento a una frecuencia Base/Turbo de 2.50/4.40 GHz sale a la venta por 4.449 dólares, mientras que la variante M lo hace por 7.453 dólares, precios a años luz de lo que ofrece AMD.

Para hacernos una idea, un AMD EPYC 7551P con 32 núcleos y 64 hilos de procesamiento @ 14nm a una frecuencia Base/Turbo de 2.00/3.00 GHz (2.55 GHz para todos los núcleos) con un TDP de 180W y 128 líneas PCIe 3.0 ronda los 2.200 dólares, con la llegada de los 7nm Intel poco podrá hacer.